Estiman hasta 4 mil baches en Toluca
Toluca, Edomex, 27 de abril de 2022.- Ante el creciente número de casos de desaparición y feminicidios en México, incrementó la demanda de artículos de defensa personal por parte de mujeres que temen por su integridad. Luego del caso de Debanhi en Nuevo León, los productos están escasos e incrementaron su precio.
“Se ha incrementado la demanda fácil un 100 por ciento, antes era muy rara la chica que gastaba en esto, a tal nivel que los productos están escasos; al menos hoy, en territorio mexicano no hay abasto, lo que ha hecho que suban los precios y a mi parecer, los costos podrían seguir elevándose”, comentó Mariana, vendedora de artículos de defensa desde hace cuatro años.
Señaló que quienes más compran son madres preocupadas en proteger a sus hijas adolescentes, así como mujeres jóvenes y trabajadoras que tienen que trasladarse solas. Tal es el caso de “Véliz”, vecina de Metepec y madre de una estudiante de secundaria, quien buscó opciones para la protección de su hija mientras ella trabaja.
“Ante la situación en el país buscamos alternativas para protegernos, ella ya entró a la escuela y causa temor, quise que ella se sienta segura, sobre todo porque el área de su escuela es un poco de riesgo; afortunadamente no hemos vivido algún caso de violencia pero es para prevenir”, dijo. Ella adquirió un anillo que emite descarga eléctrica al ser más seguro, discreto y de fácil uso.
Ante la alta demanda, también surgió la venta de muchos productos que prometen dar protección; sin embargo, a decir de la vendedora, son de baja calidad y por moda se han popularizado, como son llaveros con navaja, gas pimienta y otros artefactos coloridos. Lo que más se vende, señaló, es el gas pimienta y teaser, además, son buscados los rompe cristales (que no recomienda) y alarmas de pánico, por los cuales las mujeres están destinando montos de 100 a 500 pesos.
A pesar que la portación de dichos artefactos es ilegal en la entidad, la vendedora y feminista, indicó que las mujeres pueden ampararse en la defensa legítima, “portarlos no debe ser motivo de criminalización ya que no implica que su uso sea indebido”, expresó, además de señalar que quienes lo buscan es por la desconfianza a las autoridades y la falta de garantías de seguridad.