Asesinan a golpes a jovencita en Toluca
HONDURAS, 11 de mayo de 2017.- Francisco Herrera Argueta, de 55 años, preso desde 2015, se vistió con una falda larga, peluca rubia, lentes de sol y pechos falsos para engañar a los guardias de la prisión de San Pedro Sula, en Honduras, y escapar. Pero la forma de caminar lo delató. No pudo dominar los tacones.
Vistiendo este disfraz de mujer, trató de salir junto con familiares de otros reclusos que estaban de visita en la cárcel de máxima seguridad, el domingo en la tarde. Incluso se tomó la molestia de pintarse con lápiz labial y las uñas de color rosa.
Pero su plan se frustró cuando los guardias notaron su manera inusual de caminar, ya que, según medios locales, llevaba tacones y no los dominaba bien. También se dieron cuenta de que tenía voz de hombre.
Funcionarios del penal de San Pedro Sula dijeron que Herrera enfrentará un castigo severo. Funcionarios del penal advirtieron que podría ser trasladado a la cárcel de El Pozo, en Santa Bárbara, en el oeste de Honduras, ampliamente considerada como la prisión más peligrosa del país.
El recluso se hizo pasar por Jacinta Elvira Araujo, una mujer que había dejado documento de identidad con los guardias de la prisión, mientras visitaba reclusos.
Cuando Herrera trató de recoger el documento de Araujo en la salida de la cárcel, según medios locales, un guardia le pidió que se quitara las gafas de sol.
Ya había pasado por otros filtros de seguridad antes de que finalmente fuera detenido. «El maquillaje no pudo ocultar el hecho de que era hombre», dijo el portavoz de la policía Bayron Sauceda a medios hondureños.
Con información de BBC, El Heraldo y Prensa Libre.