La Política Mexiquense
CIUDADAD DE MEXICO; 30 DE ENERO DE 2025; Con estas líneas se pretende generar en el amable lector una reflexión que permita
entender ¿Qué es la democracia representativa a la luz de los partidos políticos? Lo que
estos deben ser de acuerdo a la Constitución Mexicana. El desconocimiento que parte
de la ciudadanía tiene acerca de los principios y plataformas electorales de los partidos
políticos, las promesas y propuestas (cuando las hay) incumplidas, el desprestigio al
término política mediante descalificaciones, demagogia y ataques entre candidatas (os),
la importancia del voto en una democracia (del griego: δημοκρατία dēmokratía, dēmos,
«pueblo» y kratos, «poder») y como se utiliza la teoría de la división de poderes.
Claudia Sheinbaum, en su primera intervención ofreció velar por cada uno de los
mexicanos sin distingo, reconoció que el disenso forma parte de la democracia y que
“Habremos de caminar en paz y en armonía para seguir construyendo un México justo y
próspero”. Este ofrecimiento se interpreta mesurado, tendiendo un puente a la
reconciliación.
Esperaríamos un gran pacto para disminuir la desigualdad y la inseguridad, en favor de
la paz, además de la justicia social.
Jesús Reyes Heroles, intelectual, teórico del Estado, sostenía que en un sistema
democrático mandan las mayorías y se escuchan a las minorías.
Mayorías y minorías constituyen el todo nacional y el respeto entre ellas, base firme del
desarrollo, del imperio de las libertades y las posibilidades de progreso”.
En este contexto, existen dos elementos importantes para que funcione la democracia:
los partidos políticos y el derecho electoral.
Los partidos políticos son y deben ser de acuerdo a la Constitución, entidades de interés
público “SIC”, en ese sentido, cuentan con estatutos, declaración de principios y
programa de acción. Cuando alguien que los representa formalmente como su candidata
o candidato, o bien cuando son gobierno, salvo excepciones, le quedan a deber a la
ciudadanía, incumplen con los principios y promesas de campaña desprestigian a la
política, asimismo, cuando entre ellos se atacan mutuamente en algunos casos hasta con calumnias, su comportamiento desilusiona y pierden el interés público que debe ser
uno de sus propósitos.
Sin embargo, para dar vida a esta democracia, además de los elementos referidos, se
requiere del voto ciudadano.
Entonces en un sistema de partidos, con sus inconsistencias, como en el que vivimos en
México, la democracia se da con el voto del pueblo, quien lo ejerce en favor del partido
o candidata (o) de su preferencia.
No siempre quienes votan conocen los principios de los partidos, desafortunadamente
se dejan llevar por narrativas, algunas de ellas tergiversan los conceptos teóricos
reconocidos en la ciencia política, como el de: democracia, libertad, división de poderes,
por citar sólo algunos.
Al respecto, Montesquieu en su teoría de la división de poderes tiene como finalidad a la
Libertad, este filósofo político nunca planteó una reivindicación en favor de la clase
trabajadora, su intención era que la burguesía ocupara un lugar en el poder, para hacer
contrapeso al monarca. En la democracia liberal se plantea la división de poderes, como
un sistema para que el poder contenga al poder. Sin embargo, en el sistema de partidos
políticos cuando uno de ellos gana el ejecutivo y gana el legislativo, la ciudadanía votó
por un programa, sin que para el caso esté presente el contrapeso de poderes, lo cual
no es motivo de la inexistencia de democracia, pues la esencia de ésta, radica en el
poder del pueblo para elegir a sus representantes.
Cuando se ejerce el derecho al voto, lo mejor es que se haga en forma consciente del
programa que se ofrece o propuestas de las candidatas (os). Hoy, la mayoría de los
ciudadanos son campesinos, obreros, empleados, profesionistas, micro, pequeño y
mediano empresarios, estas últimas categorías entran en una clasificación de clase
media, con la diferencia del poder adquisitivo que tiene cada una, sin dejar de lado, a la
categoría de élite económica, la cual es minoría en este México desigual.
Por lo tanto, el voto requiere reflexión sobre quienes nos representan, sin que se
consideren los calificativos falsos, manipuladores de las personas de buena fe que no
son avezados en conceptos como el: comunismo, el socialismo y la democracia, relativos
a la ciencia política y economía política.