La mayoría silenciosa

Legislar: Negocio redituable que nadie fiscaliza

20 millones se pueden beneficiar con nueva Reforma de Pensiones

Durango y Quintana Roo destacan por pedir moches: Coparmex

La extradición de Emilio Lozoya y la elección de consejeros del INE parecen no tener nada en común, pero comprueba que legislar se ha vuelto un negocio redituable. En el fondo, cada uno de los asuntos demuestra que nuestros diputados solamente llegan para negociar y enriquecerse sin tomar en cuenta las necesidades de La Mayoría Silenciosa. Quieran o no, los diputados y senadores son corresponsables de la falta de desarrollo y democracia, si estamos sumidos en el tercer mundo, ellos tienen parte de culpa.

Si bien es cierto que en política la negociación es una de sus líneas básicas, siempre deben de anteponer el bien el ciudadano y la nación, cosa que a través de décadas se les ha olvidado a los legisladores, suena mal recordarlo, pero ese sistema de corrupción legislativa hay que atribuirlo al PRI y llegó para quedarse.

El caso de Emilio Lozoya pondrá en entredicho a diputados de muchos partidos políticos que a través de prebendas y dinero aprobaron iniciativas que perjudicaron la hacienda pública, como es el caso de la Reforma Energética y la compra de bienes, entre ellos, la planta de Agronitrogenados con un sobreprecio de 500 millones de dólares.

Este caso sólo es un ejemplo de todas las historias que son un secreto a voces entre La Mayoría Silenciosa y desencadena en el órgano legislativo más grande del país, pero se replica de manera pequeña en cualquier Congreso de México.

Es una forma acostumbrada por los titulares del Poder Ejecutivo para negociar, cooptar o someter al Poder Legislativo en los estados. Los contrapesos no son para ver la mejor manera de resolver los problemas, esa idea es utópica y fue rebasada hace muchas décadas.

En el Estado de México, cuando el PRI perdió la presidencia de la República, versiones muy cercanas al Poder Legislativo afirman que con dinero recobraron el poder perdido en las urnas, muchos personajes ganaron viajes y dinero a raudales por aprobar iniciativas y otros por dividir al grupo parlamentario de Partido Acción Nacional en el Congreso mexiquense.

Al igual que en el Congreso de la Unión, se dividen las posiciones del Instituto Nacional Electoral; los institutos electorales en los estados tienen como base repartir cuotas entre los partidos para integrar los consejos con personas afines, de acuerdo con el peso electoral que tenga cada partido en su Legislatura.

Legislar en este país se ha convertido en un negocio muy redituable, en dónde nadie fiscaliza la riqueza de nuestros gobernantes. Situación que pone en desventaja a La Mayoría Silenciosa que cada vez sufre del terrorismo fiscal de la Secretaría de Hacienda, a pesar de generar empleos y riqueza.

Desafortunadamente a La Mayoría Silenciosa la mueven dos cosas, el morbo y la indiferencia, la primera, por saber a quién exhibirá Lozoya y si el presidente será capaz de encarcelar algún pez grande; y segunda, la indiferencia por saber quiénes serán los consejeros que aprobarán en el Congreso y van a calificar la elección del 2021.

En México

20 millones de mexicanos se podrán beneficiar con la nueva Reforma de Pensiones que anunció el presidente Andrés Manuel López Obrador, lo bueno es que el aumento que sufrirán no repercutirá en el salario de los trabajadores, bajarán las semanas que se tendrán que cotizar para acceder a una pensión y los sindicatos y empresarios están de acuerdo.

La Reforma será un golpe mediático en la popularidad de López Obrador en cuanto sea aprobada y estará en el ánimo de La Mayoría Silenciosa cuando inicien las campañas electorales, seguro habrá más cosas que capitalizar de cara al 2021.

En México

Para reactivar la economía hay que generar condiciones y confianza entre los empresarios y emprendedores; sin embargo, los datos dados a conocer por la Coparmex manifiestan la corrupción que hay en Durango, donde 7 de cada 10 socios tuvieron que pagar algún costo extra por un trámite de gobierno, y en Quintana Roo 5 de cada 10, calificación que los ubica en los últimos lugares junto con Chiapas y Tabasco.

Es lamentable que en un lugar turístico como Quintana Roo tenga esa imagen, en un momento importante para reactivar su economía, el gobernador, Carlos Joaquín González, tiene mucho trabajo por delante si quiere generar empleos y abrir negocios para que La Mayoría Silenciosa salga adelante.