La Polémica | A 10 días, robos y saqueos en ayuntamientos
Valle de Bravo en el hoyo
No entienden que no entienden. La máxima gringa hoy aplicada a varios políticos mexicanos también hay que decirla sobre el impresentable y bribón alcalde de Valle de Bravo, Mauricio Osorio.
Asegurada la candidatura del PRI para que pueda reelegirse, cosa que cada día se ve más compleja, el alcalde ha comenzado a disfrutar de un periodo de relax –con todo y tener infiltrado al crimen en su policía-, y se da tiempo de despachar los asuntos de su coja administración, desde el campo de golf.
Y es que a este reyezuelo le ha dado por, en sus tiempos libres, que son muchos a lo largo de la semana, tomar sus palos y jugar 18 hoyos, para “relajarse” de tan estresante labor al frente de… de la labor en la que está al frente.
Desde el campo, lo mismo firma documentos, que invita a empresarios trasnochados a quienes presume su liderazgo y afecto entre los líderes de su partido.
Algunos de sus cercanos están pensando poner una oficina en el hoyo dos – que es el que nunca puede pasar- para la atención de asuntos del ayuntamiento, y que el alcalde tenga ahí un pequeño escritorio y hasta un silloncito por si se cansa.
Ese es el nivel que tienen algunos políticos como este granuja.
Pero la culpa no es del indio, dicen en Valle de Bravo, sino de quien lo hace golfista.
Se hacen con la nómina.
Y hablando de granujas… se solicita atentamente a Eduardo Neri, que despacha – es un decir- como alcalde de Capulhuac, que pague, no sea malito, las quincenas que les debe a decenas de trabajadores del ayuntamiento, que ya están desesperados, pues algunos llevan sin cobrar desde diciembre.
Los afectados ya quieren matarle un borreguito al Neri… pero en la espalda.
Comienza a cocinarse un consumé que poco le va ayudar para buscar la diputación que ya le prometieron, y que en el Frente dan por perdida, ante estos numeritos.