
Refuerza Teoloyucan infraestructura pluvial para proteger a la población
TOLUCA, Edomex., 4 de julio de 2025.– Tras más de tres reuniones con personal del Ayuntamiento de Toluca, los habitantes organizados consiguieron una inspección oficial, en la que se constató que la construcción sobrepasaba lo estipulado en la Licencia Municipal de Construcción. Esta licencia, autorizada por el Arq. Eliud Gabriel Medina Peralta, solo permitía labores de movimiento de tierras, sin embargo, ya se habían abierto cepas para zapatas y se había introducido material de construcción, lo que evidenció un avance mayor no autorizado.
La Dirección General de Innovación, Planeación y Gestión Urbana fue quien finalmente colocó los Sellos de Suspensión Indefinida, en respuesta a la exigencia vecinal de frenar una obra sin permisos en zona habitacional.
Durante al menos dos sesiones de Cabildo, la Octava Regidora de Toluca, Shantall Zepeda, expuso que además de carecer de licencia para el cambio de uso de suelo, se había demolido un camellón destinado exclusivamente al transporte de carga, lo que violaría el artículo 18.30 del Código Financiero del Estado de México.
A pesar de sus intervenciones, el alcalde Ricardo Moreno ignoró las denuncias y no actuó de manera inmediata. No fue sino hasta la presión vecinal constante que se generaron respuestas concretas.
Durante una intervención pública en La Toluqueña, el alcalde Ricardo Moreno admitió que no existe una Licencia de Cambio de Uso de Suelo vigente para dicha construcción. Aclaró que ese trámite correspondería al Gobierno del Estado y que el documento que respalda el proyecto —una Opinión Favorable otorgada por la administración anterior— no está disponible, ya que forma parte del expediente de entrega-recepción.
Al preguntarle qué se construía en ese terreno, Moreno dijo desconocer el propósito del proyecto, lo cual encendió aún más la indignación de los vecinos, quienes perciben falta de transparencia y contradicciones dentro del mismo Ayuntamiento.
Durante las reuniones vecinales encabezadas por la regidora y residente Shantall Zepeda, el propio arquitecto Gabriel Medina comentó que se pretendía construir mini bodegas, lo cual generó mayor alarma, ya que la zona está clasificada como de uso habitacional. Esta declaración contradice las versiones iniciales y evidencia la falta de una línea clara de comunicación por parte del gobierno local.
Más de mil vecinos están organizados e inconformes, y exigen que se lleve a cabo la clausura total de esta obra sin permisos, la cual, de continuar, atentaría contra la normatividad y la tranquilidad de la comunidad.