Participó la Codhem en la XV edición de la Marcha del Orgullo LGBTTTI

TOLUCA, Edomex., 11 de agosto de 2019.- La Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), a través de integrantes del Consejo Ciudadano para la Prevención y Eliminación de la Discriminación y de la Unidad de Igualdad de Género y Erradicación de la Violencia, participó por séptimo año consecutivo en la Marcha del Orgullo LGBTTTI que en esta ocasión celebró su XV edición.

En representación del ombudsperson, Jorge Olvera García, el jefe del Departamento contra la Discriminación, Mario Ernesto Montes de Oca Bernal,  destacó la importancia de la presencia de la Codhem durante la marcha para promover y apoyar los derechos humanos de la población LGBTTTI: «son eventos que vienen de la sociedad y nos hacen ver que las instituciones deben cambiar desde adentro; hay que trabajar para prevenir y disminuir la homofobia, la discriminación hacia la población lésbico-gay», enfatizó.

Las consejeras y consejeros Josseline Mendoza Aguilar, Marilyn Ramón Medellín, Óscar Sánchez Esparza, Sharon Michelle Hernández Huerta, Katya Esquivel Cañas y Luis Alfonso Guadarrama Rico, dieron el banderazo de salida y participaron en el recorrido por las principales avenidas de la capital mexiquense, distribuyendo material informativo.

Expresaron su respaldo a la diversidad sexual y la defensa permanente de la población LGBTTTI integrándose a un contingente y al Módulo de Información que fue instalado en la Plaza de los Mártires donde se distribuyeron folletos sobre cómo presentar una queja, el respeto a la diversidad sexual y los derechos de personas con VIH- Sida, entre otros temas.

Ahí, René Mondragón, representante de Codisem, agrupación organizadora de la Marcha, leyó un manifiesto en el que resaltó que aún existen sectores que “los ningunean, lapidan y condenan: el escarnio público ha sido por mucho tiempo su arma más efectiva pero basta un ejercicio de razón para hacer evidente su equívoco», recalcó.

Sin embargo, agregó, en cuanto más los rechazan ellos más orgullo sienten, pues ser gay o lesbiana «no quiere decir que tenemos una enfermedad, no nos hemos desviado de camino alguno, no vivimos en pecado», por tanto, todas las personas basadas en el respeto deben ser reconocidas y protegidas, concluyó.