
Volcadura de tractocamión en la México-Querétaro
“Operación Liberación”, así llamaron las autoridades federales y del Estado de México el operativo de 63 cateos a establecimientos comerciales de 14 municipios: Amanalco, Donato Guerra, Ixtapan de la Sal, Ixtlahuaca, Malinalco, San Felipe del Progreso, Tlatlaya, Tejupilco, Temascaltepec, Tenancingo, Texcaltitlán, Valle de Bravo y Villa Victoria, cuyo ecosistema es donde tiene operaciones la familia michoacana, pequeños “narco estados” como parte de una estructura mayor, la cual podemos encontrar replicadas en muchas regiones del país.
La Guardia Nacional y una oxidada Fiscalía General estatal mexiquense, echaron a andar un operativo (alguien ve muchas películas gringas) llamado OPERACIÓN LIBERACIÓN, mismo que generó bloqueos y varios minutos de grabaciones en videos en donde se demuestra que los que mandan son los narquillos y extorsionadores, mismos que sacaron huyendo a los descoloridos agentes estatales y fue hasta que llegó la Guardia Nacional cuando se hizo algo con cierto decoro.
Lo más relevante fue la captura de una funcionaria muy menor de Ixtapan de la Sal, Yareli “N”, tercera regidora de ese municipio y quien fue señalada por haber secuestrado a un comerciante para obtener dinero… relacionada con la familia michoacana, ¿a esto podemos llamar una importante captura? ¡si es así, supongo que después de esto, la “familia michoacana” se vendrá abajo tras perder a una de sus más relevantes líderes!
El esfuerzo de los genios de la fiscalía mexiquense por hacer pasar este operativo como el gemelo del “enjambre “ provoca amargas carcajadas para los habitantes de esos municipios, mismos que llevan mucho tiempo bajo el patronazgo de todo tipo de delincuentes y sus nomenclaturas criminales, porque la tragedia no radica en la impunidad que baña a estas organizaciones sino en los cuerpos de seguridad municipales, las de la entidad, la fiscalía y sus “fiscalitos” regionales quienes danzan al ritmo de los narcos, no de ahora, de años atrás. Claro está que tras el haberse detectado compañías dedicadas a la extorsión (las dos más conocidas son el “Sindicato Libertad” y “Sindicato Bradosva”) quienes manejan los precios de productos para la construcción, carne de res, pollo o puerco, operación de minas, forrajearías y hasta el servicio de paquetería, con los consabidos efectos inflacionarios.
¿De verdad en la Fiscalía del Estado de México no se percataron de todo esto mucho tiempo antes? Ya suena a chiste de moda tabasqueño.
Y es que detrás de toda esta parafernalia en medios, sobándole el ego a quien decidió bautizar esto como OPERACIÓN LIBERACIÓN, surge la obligada pregunta ¿cómo es que un estado de descomposición se pudo haber dado en tantos municipios sin que antes se hubiese atacado?
La obvia respuesta la encontramos, ooootraaaavezzzz, en la complicidad, misma que por las dimensiones de dicha radiografía y las fracturas sociales a revisar, obligan a que el gobierno federal y toda la fuerza de sus herramientas legales, logísticas y de inteligencia incluyan en una revisión mucho más a fondo, con un solo objetivo: arrancar de raíz (otra trillada frase pero necesaria en estos momentos) la planta que alimenta a este tipo de organizaciones y que no son otras más que los frutos podridos en los cuerpos policiacos y muchos hombres y mujeres mezclados en política municipal y estatal …o ¿cómo es posible que esta célula de la “familia michoacana “ y el maquillaje de sindicatos hayan podido instaurar un reinado de extorsión por la vía de la venta de productos de toda índole en 14 municipios?
Los operativos son necesarios, cierto, pero se requiere de labores de inteligencia que culminen en desmantelar de fondo a estas estructuras, que acaben de una vez por todas con las enquistadas relaciones entre criminales y “servidores” públicos, que se apliquen verdaderamente los desincentivos para la realización de esta práctica, porque si no, solo tenemos los llamados “efectos cucaracha” y los grupos criminales solo se cambian de región, de estado y hasta de “cachucha”. Por eso, no nos engañemos, el verdadero objetivo de este OPERATIVO LIBERACIÓN tendría que haber sido en contra de las mismas autoridades que los protegen, solo así se acabará con este imperio de los malditos criminales.