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OCUILAN, Edomex., 20 de septiembre de 2017.- La familia Cano mueve los escombros en su domicilio acordonado, se aferran a su patrimonio a pesar de ser considerado como inhabitable, aguantar el llanto es imposible al observar su casa a punto de colapsar.
La vivienda de María es una de las más de 30 dañadas en la comunidad de Santa Martha, las paredes se vinieron abajo y las estructuras que aún siguen todas tienen cuarteaduras tras el temblor que sacudió México.
El mayor terremoto que recuerdan los vecinos del poblado ubicado a unos 15 minutos de la cabecera municipal, golpeó a personas que tardaron más de 20 años en construirlas, volver a empezar es casi imposible.
«Mire como quedó nuestro patrimonio, en segundos perdimos todo, lo que nos costó una vida ya no lo tenemos, ojalá nos ayuden, nos dijeron que no podemos seguir aquí porque puede caerse», dijo doña María.
A un día del desastre, en las calles del lugar hay vidrios, paredes agujeradas y mucha gente que no puede ingresar a sus casas por miedo a réplicas pero que se niegan a abandonarlas, temen sean saqueadas.
En la búsqueda desesperada de apoyos preguntan a las personas que llegan que no son del lugar si son los del gobierno para que les ayuden a reconstruir su hogar, pero ni policías han llegado, parecen olvidados.
La primaria y secundaria tendrán que ser reconstruidas, directivos educativos sacan las computadoras y equipo de las fachadas que siguen en pie antes de que se derrumben, el panteón también sufrió daños en la fachada principal.
El alcalde, Félix Alberto Linares González, reconoció que es una de las 8 comunidades más afectadas, además, reiteró se tiene un censo preliminar de por lo menos 750 inmuebles dañados, de ellos, 200 son inhabitables.
Además, agregó que tras tener el recuento final de los daños solicitará al gobierno que se declare el municipio como zona de desastre, todas las iglesias, muchas del siglo XVI, tienen daños importantes en sus estructuras.