
Rezago en Salud en México (1985–2018)
Se colocan Alfredo del Mazo y Delfina Gómez como los punteros en la contienda por gubernatura
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El segundo debate de los candidatos a la gubernatura del Estado de México no tuvo mayores sobresaltos, tampoco apareció alguna acusación escandalosa o relevante, respecto de lo que ya se ha dicho en el proceso, lo único claro es que los participantes reconocen en sus propias estrategias que la puja es entre dos: Delfina Gómez Álvarez y Alfredo del Mazo Maza.
Desde la primera oportunidad; Del Mazo, candidato de la coalición PRI-PVEM-PANAL-PES, criticó a Delfina Gómez y el proyecto que representa con el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), anteponiendo que la coyuntura estatal requiere un gobernador preparado, con experiencia y trayectoria.
El abanderado priísta señaló que la economía de los habitantes depende de la capacidad y experiencia del próximo gobernador, luego aseguró que Delfina Gómez no está preparada para hacerlo.
En su turno, la candidata de Morena se presumió con ventaja en las preferencias por la gubernatura y respondió a Del Mazo que no tiene experiencia, pero para robar, a partir de ese momento el escenario evidenció que ambos son quienes disputarán la elección del primer domingo de junio, toda vez que el resto de los contendientes van abajo en las mediciones.
De hecho; Juan Zepeda Hernández, el candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), entendió la coyuntura y en su oportunidad recordó que antes del primer debate estaba en cuarto lugar en las encuestas, pero logró posicionarse en tercero, además advirtió que en los próximos días rebasará a Delfina Gómez, de modo que -dijo- “el tiro” será con Del Mazo.
Zepeda lució envalentonado, en momentos exageró en su estrategia de menospreciar a los candidatos, sin importar el género, incluso abusó en la postura triunfalista y de pretender mostrarse como un sabio y mostrar a sus homólogos como inferiores, pues en realidad la panista Josefina Vázquez Mota tiene mucho mayores tablas y lo supera evidentemente.
Por otro lado, su crecimiento en realidad favorece al priísta Alfredo del Mazo, ya que la preocupación del cuarto de guerra de dicho candidato era debilitar a Delfina Gómez, cuya fortaleza es el respaldo de la población, no la suma de alguna estructura relevante en todo el estado.
Luego entonces si en las preferencias se debilitan Delfina y Morena y en esa medida crece Juan Zepeda, el beneficiario es Alfredo del Mazo, ya que el PRD no cuenta con la maquinaria necesaria para vencer al priísmo en esta entidad, diversos alcaldes y líderes de grupo son parte del mismo sistema, del cual han recibido mucho.
Zepeda podría quitarle seguidores a Morena, pero difícilmente ganaría con lo que tiene la gubernatura, por eso su crecimiento es parte de la estrategia del PRI y sus aliados.