Continuarán realizando operativos de seguridad en el municipio de Toluca
Toluca, Edomex, 10 de mayo de 2022.- “El que mi vientre no haya gestado a un ser no me hace menos mamá”, expresó «Ana», una madre adoptiva toluqueña, quien a 10 años de poder celebrar cada Día de las Madres recuerda que aceptó que no podría ser madre biológica pero asumió maternar a través de la adopción, lo cual aseguró, es la mejor decisión de su vida.
Con un nudo en la garganta, recordó que tras recibir la noticia de que su esposo y ella eran una pareja infertil, someterse a tratamientos y pasar por depresión, fue su esposo quien propuso la adopción, “me dijo oye nosotros tenemos mucho amor y queremos un bebé y ¿si adoptamos?”, palabras que dijo, recuerda a la perfección. Aunque al principio el miedo al rechazo al estar en una sociedad con poca cultura de la adopción, su deseo y amor la llevó a iniciar junto con su esposo todos los trámites.
Tras un tortuoso y largo camino, recordó el día en que recibió la noticia de que eran una pareja apta y el momento de conocer a su hija, fue único.
“En cuanto nos la presentaron quedamos enamorados de la bebé, fue un momento increíble que si yo tuviera que pasar lo mismo a 10 años de ese momento lo volvería a hacer, si tuviera que pasar inseminaciones, estudios lo volvería a hacer feliz por encontrarme con mi hija; ésta emoción, felicidad de poder adoptar cuando no puedes ser mamá biológica, pues desde que la tomé ya me sentí su mamá”, expresó entre lágrimas.
Explicó que la pequeña que está por cumplir 11 años, sabe que no nació de la pancita de su mamá, pues asegura nada hace más libre que la verdad, y aunque no fue fácil explicarle lo sabe y lo trabajan para hacerla una persona fuerte y reconozca que su familia es diferente como hay tantas, “ésta situación fue un puente para encontrarnos pero estábamos destinados a ser familia, somos una familia feliz, fue una niña muy deseada y buscada”, añadió.
Aunque en su momento, dijo, no entendió porqué no se le dieron las cosas de la manera común el tener a su hija es un orgullo, “la tengo a ella que desde las 6 de la mañana está ¡mamá, mamá, mamá!, soy la mujer más feliz del mundo, ella es mi luz y motor siempre”
“El que mi vientre no haya gestado a un ser no me hace menos mamá, las responsabilidades se suman igual, mi hija es mi hija en toda la extensión de la palabra, sufro igual que cualquier mamá biológica, regaño igual que cualquier mamá biológica, educo igual”, dijo.
La pequeña, asegura, su mamá es lo más importante y como muchos hijos e hijas la considera la mejor, “para mi mi mamá es una amiga, compañera, con quien puedo compartir mis sentimientos y se que nunca me va a dejar sola, yo la amo mucho y no hay nada más importante para mí y no la cambiaría por nada en este mundo”, expresó.