La Política Mexiquense
Tenso el ambiente político a 85 días de la transmisión del poder en el Ejecutivo Estatal
La operación de diversos equipos generó conflictos en la campaña
Del Mazo no podrá actuar con mano firme mientras Eruviel siga al frente del gobierno
Mientras tanto diversos priístas se promocionan para el próximo gabinete
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Tenso al ambiente al interior de los grupos dominantes en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Ejecutivo, pues aun cuando faltan 85 días para la transmisión de poderes, personas cercanas al virtual triunfador de la contienda por la gubernatura, Alfredo del Mazo Maza, quisieran encontrar elementos que descifren los resultados del domingo cuatro de junio, pues no se puede ocultar que hay quienes sugieren traiciones por parte de personaje claves.
Sin duda se trata de un tema complicado para Alfredo del Mazo, quien -si no lo ha hecho- tendría que allegarse de verdaderos especialistas en ingeniería electoral para que se elabore un análisis detallado que ofrezca una aproximación de las deficiencias y los operadores que quedaron mal respecto de las proyecciones previas a la jornada electoral.
En la operación de la campaña priísta hubo varios equipos que carecieron de una efectiva coordinación, ya que cada uno de ellos apostó por imponer su hegemonía, en tanto que otros personajes que han ocupado cargos relevantes durante su trayectoria difícilmente escucharon opiniones de quienes les sugerían errores en sus planteamientos.
Tanto en el Comité Estatal como en el equipo de campaña de Alfredo del Mazo operaron diferentes equipos que en el contexto de grupos son contrarios, lo cual también dificultó las cosas, por el contrario, unos y otros se colocaron piedras sobre el camino y generaron intrigas con el objetivo de dejarlos mal parados ante quienes llevaban el mando.
Obviamente Alfredo del Mazo no estuvo al tanto de todo este tipo de episodios, ya que se concentró en la campaña que de por si no fue fácil, lo que sin duda fue un acierto porque de todas formas habría sido complicado intentar poner orden sobre equipos que tienen hasta el momento la fortaleza de considerarse cercanos al gobernador en turno, Eruviel Ávila Villegas.
Este tipo de situaciones se presentaron en diferentes asuntos de la campaña, incluyendo la Comunicación y Relación con medios, ya que de la misma forma que ocurre en el Ejecutivo, Carlos Aguilar Cano asumió el control del tema, además fue quien determinó con qué medios y periodistas debía procurarse una buena relación y con quienes entablar acuerdos.
César Castillejos, quien llegó de la federación con la encomienda de llevar la campaña de medios, optó por la inercia, evitar conflictos internos y dejar que todo transcurriera como desde el inicio, por lo que no corrigió y prácticamente no tomó decisiones. El área de Comunicación del CDE del PRI, hizo lo mismo que antes de la campaña, atender la línea de Carlos Aguilar y llevar la parte institucional: el envío de información y agenda oficial.
Al final, los resultados fueron de pesadilla para Alfredo del Mazo en las zonas de dominio del grupo en el poder en el Ejecutivo y muy buenos donde los liderazgos tradicionales forman parte de las corrientes alternas al eruvielismo; sin embargo, hay ánimos de revancha y acusaciones de todo tipo.
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