El tiro con arco, potencia en México

CIUDAD DE MÉXICO, 21 de diciembre de 2017.- Referirse al origen de tirar una flecha con un arco requiere ir a la era paleolítica, donde los primeros habitantes utilizaban esta herramienta para la caza; hoy en día el Tiro con Arco se posiciona como un deporte caracterizado por ser uno de los que exige más precisión en el alto rendimiento.

Alejandro Vélez Sánchez, Jefe de Entrenadores Nacional Juvenil de Tiro con Arco del Centro Nacional de Desarrollo de Talentos y Alto Rendimiento (CNAR), explicó que con el paso del tiempo esta disciplina ha evolucionado tanto deportiva como tecnológicamente, generando que los atletas tengan que llegar a la perfección para destacar en un mundo de arqueros.

El Tiro con Arco exige mucha disciplina y que castiga si lo descuidas aunque sea lo más mínimo, ya que la coordinación que requiere este deporte hay que trabajarla constantemente. Debe existir un gran trabajo multifuncional, hablando concretamente de la fuerza, coordinación, equilibrio y flexibilidad”, mencionó el entrenador.

Dentro de esta disciplina, el disparo con Arco Recurvo y Arco Compuesto son los que resaltan, ya que ambas variantes cuentan con Copas del Mundo de la especialidad y participan en Juegos Centroamericanos; Recurvo participa en Juegos Olímpicos y Panamericanos; Compuesto aún no es considerada modalidad olímpica y tampoco tenía lugar en Panamericanos, sin embargo acaba de ser tomada en cuenta para la edición de Lima, Perú en 2019.

“La principal diferencia entre estos arcos radica en que el Compuesto está basado en dos poleas, las cuales otorgan cierto descanso y aumentan la velocidad a la que sale disparada la flecha. En el Recurvo se trabaja con un libraje constante, por tanto tiene una exigencia más elevada y requiere el desarrollo de la resistencia y la fuerza”, explicó Vélez.

El entrenador mencionó que para un arquero es fundamental trabajar ámbitos como el psicológico, nutricional, físico, técnico y táctico. El equilibrio corporal juega un rol importante, ya que no debe existir predominancia entre un brazo y el otro; el arquero debe estar capacitado para trabajar con cargas extra y pesos elevados, por tanto es necesaria una estabilidad corporal.