TLC no puede romperse de manera fácil: Canacintra

TOLUCA, Edomex., 23 de enero de 2017.- Ariel Rodríguez Polo, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), quien hace unos días asumió el cargo que ocupará hasta el 2018, declaró que por el contexto que se está viviendo con Estados Unidos de incertidumbre debido a la llegada de Donald Trump al poder, es necesario que se lleven a cabo medidas cautelosas en el sector industrial en cuanto a proyectos de inversión.

Señaló que se debe buscar fortalecer la cadena de proveeduría dentro del país, así como su consumo interno debido a que el año anterior se logró un crecimiento del 4.2 por ciento de los productos en el Estado de México, marcando una clara tendencia que sea favorecida a las compras nacionales.

Lo que implica financiamiento especial para las empresas que les permite modernizar sus procesos productivos y acreditarse como proveedores competitivos.

En cuanto a la negociación del Tratado de Libre Comercio, comentó que ambos países cuentan con un andamiaje legal que no puede ser destruido así nada más, sobre todo porque el país norteamericano cuenta con un comercio que implica 42 millones de dólares cada año, mientras que México introduce 500 mil millones de pesos a Estados Unidos, siendo mentira el que le robamos sus empresas, demostrando que Trump solamente busca generar incertidumbre.

Rodríguez Polo destacó que el argumento de que el TLC beneficia únicamente a nuestro país, es una falacia debido a que este impacta directamente la bolsa de Nueva York, por lo que es necesario renegociarlo, mejorando las acciones de rentabilidad.

Especificó que en el caso de la entidad el Tratado de Libre Comercio ha sido beneficio debido a que durante el 2016 el Estado de México logró recaudar 15 mil millones de dólares en inversiones extranjeras directas, apostando a que este año sea igual o mejor, dejando claro que hasta el momento de las nueve armadoras ubicadas en territorio mexiquense ninguna se retirará.

Finalmente, resaltó que el presidente estadounidense debe tomar en cuenta que el 82 por ciento de lo que se produce en México va a Estados Unidos, demostrando que la calidad es bastante alta en productos y servicios.