Un sueño ser Agente de Cambio Juvenil: Fernanda Delgado

CIUDAD DE MÉXICO, 29 de marzo de 2018.- En diciembre pasado se dio a conocer de manera oficial que María Fernanda Delgado fue designada Agente de Cambio Juvenil de la Delegación Mexicana en Buenos Aires 2018, lo que para ella significa una forma de materializar todo el esfuerzo puesto en su sueño de trabajar directamente en el Movimiento Olímpico.

María Fernanda explica que los Juegos Olímpicos de la Juventud tienen diferentes programas para impulsar a jóvenes deportistas, uno de ellos es el de Young Change Makers o Agentes de Cambio Juvenil.

“El programa consiste en ser parte de cada delegación deportiva (en mi caso la de México) y actuar como el vínculo entre el programa cultural y educativo de los Juegos y el deportivo. Los atletas saben que van a competir, pero también a un intercambio cultural y a experimentar lo que es el Movimiento Olímpico de primera mano”.

Asegura que la meta es que los atletas saquen el mayor provecho de la experiencia vivida para que esto sea algo más que una competencia, un momento clave de su trayectoria deportiva. “Al mismo tiempo nos convertimos en Agentes de Cambio en nuestras comunidades para utilizar al deporte como forma para hacer el mundo un poco mejor”.

La idea es “que los atletas entiendan el concepto de olimpismo y vivan los valores olímpicos de respeto, excelencia y amistad, desde ahora y a lo largo de su vida. Si puedo hacer que alguien más se sienta igual que yo, creo que eso ya es ganancia”.

María Fernanda Delgado del Río, de 29 años de edad, estudió mercadotecnia y fue la primera mexicana en ser admitida en la Academia Olímpica Internacional para cursar el Máster Estudios Olímpicos, Educación Olímpica y Administración de Eventos Olímpicos.

Ha sido voluntaria en Sochi 2014, en los JP Toronto 2015, Juegos Olímpicos Rio 2016 y PyeongChang 2018. También colabora con la Academia Olímpica Mexicana y señala que durante sus estudios en el Máster aprendió lo relacionado al programa de Agentes de Cambio y le interesó el tema.

“Le pedí al Maestro Carlos Hernández Schäfler (presidente de la Academia Olímpica Mexicana) la oportunidad de ser considerada para la posición, ya que cada Comité Olímpico Nacional tiene que nominar a alguien, y el Comité Olímpico Internacional (COI) aprueba.

Pedro Cuervo (Jefe de Misión de la Delegación Mexicana) me ayudó a mandar la solicitud y en diciembre de 2017 el COI confirmó mi lugar en Buenos Aires 2018”.

Para finalizar, expresó que se siente feliz. “¡Aún no lo creo! En un nivel personal, es una forma de materializar todo el esfuerzo puesto en mi sueño de trabajar directamente en el Movimiento Olímpico. No soy atleta profesional, pero eso no significa que no pueda ser una olímpica fuera de la cancha.

El olimpismo es una forma de vida que puede ayudar a un individuo y al mundo a ser mejor, algo que todos necesitamos. Así que contribuir a esa causa con un rol tan activo es un honor para mí, una forma de devolver algo de lo mucho que me ha dado”.