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IXTAPAN DE LA SAL, Edomex., 15 de noviembre de 2013.- Aunque todavía hay tareas pendientes, México ha alcanzado avances muy importantes en materia de apropiación social de la ciencia, ya que ha logrado incluir el tema en sus políticas públicas.
Durante la inauguración de la reunión del Convenio Andrés Bello, CAP, que reúne a España y 12 países de América Latina, Mónica López Castro, secretaria ejecutiva del organismo, destacó que nuestro país ha dado un paso muy importante al dejar establecida en la normatividad, la política de desarrollo de acciones para la apropiación social de la ciencia, lo cual sólo se da en España y México.
Resaltó que tener programas de apropiación social de la ciencia es lograr que el ciudadano «de a pie» conozca la importancia que tienen la ciencia y la tecnología en la vida diaria y acercar cada vez más a los ciudadanos a conocer cómo los problemas ambientales, por ejemplo, se pueden resolver teniendo conocimientos en ciencia y tecnología.
López Castro reconoció que es un problema general en los países dedicar bajo porcentaje del PIB a la ciencia y la tecnología y en México es una discusión de hace muchos años lograr que se asignen más recursos al tema social como educación, cultura, ciencia y tecnología.
Todavía no hemos llegado al punto en que el presupuesto nos parezca suficiente para ninguno de los países, pero en la medida en que se puedan hacer análisis económicos y se demuestre el retorno que tiene canalizar recursos, los gobernantes se irán convenciendo de incrementarlos, dijo
Destacó que una vez que arrancó el Convenio Andrés Bello a finales de la década de los 90, la discusión se ha centrado en comunicar la ciencia, luego se habló de popularizar la ciencia y en la reunión, que concluye este viernes, el tema es la apropiación de la ciencia.
Subrayó que en el caso de México, la Semana de la Ciencia es un programa que claramente permite tener apropiación social de la ciencia y no verla como algo muy lejano, «con unos señores de bata blanca en unos laboratorios», sino en el día a día cómo aprender a preguntarse sobre los fenómenos y cómo influir en ellos.
Añadió que el hecho de tener la Feria de la Ciencia en un espacio tan emblemático como es el caso del zócalo de la Ciudad de México y que la gente pueda ir y conocer los fenómenos científicos, es muy importante.
Los museos interactivos, incluso la formación de periodistas sobre cómo comunicar la ciencia.
Al inaugurar el evento, Julio César Ponce, titular de la Unidad Técnica de Proyectos de Comunicación Estratégica e Información Estratégica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, Conacyt, reconoció que la apropiación social de la ciencia es una asignatura pendiente, lo cual no es privativo de México, pues en muchos países se tienen problemas para transmitir lo que los científicos y tecnólogos innovadores hacen.
Resaltó que este año el Conacyt inició el programa «Ciencia para Todos» con el que apoyó con dos millones de pesos a cada uno de los consejos estatales de ciencia y tecnología para realizar actividades de difusión.
Además se están fortaleciendo las actividades de las semanas nacionales de ciencia y tecnología que se realizan en cada estado.
Raului Vargas Torres, director del Consejo Mexiquense de Ciencia y Tecnología, Comecyt, advirtió que «si no concretamos el círculo donde se genera y difunde el conocimiento, «estamos siendo responsables los que nos dedicamos a ello y esa irresponsabilidad tiene costos muy altos».
Mencionó que la apropiación social de la ciencia la ocupa en este momento el zócalo de la Ciudad de México pero también que este año por primera vez en el Estado de México se llevó a cabo la Feria de la Ciencia y la Tecnología, lo cual no es un tema menor.
El Convenio Andrés Bello es un espacio virtual para compartir información sobre la apropiación social de la ciencia, la tecnología e innovación en España y los países de América Latina.