Balazos en el pie
En Twitter Santiago, uno de los usuarios, pregunta: “¿Qué onda con las Tiendas Oxxo que incendiaron en Tecámac y en el estado de Hidalgo, a qué se debió?”. @GVillaJ, otro usuario, también insistió: “¿¿Qué fue siempre lo que paso en el Oxxo de Tecámac, solo vandalismo o algo más fuerte??”.
Las preguntas son muy válidas en estos momentos. La misma duda tenemos miles de mexicanos, ¿es algo más fuerte?
No es simple vandalismo, nada de eso, por la forma en que se desplazaron y accionaron los grupos armados -usaron R-15-. Tenían una consigna de cometer atentados en esas tiendas de conveniencia y causar pánico en los estados que alguna vez gobernaron Miguel Ángel Osorio Chong y Enrique Peña Nieto.
¿Quiénes son los agresores? Podemos preguntar, pero nadie va a dar una respuesta concreta, ya que los van a tratar de hacer pasar como simples robos o actos de vandalismo, pero atrás está el crimen organizado, eso es seguro.
El mensaje es claro y contundente, se trata de un grupo poderoso que cuenta con células, armas, dinero, droga, vehículos, “soplones”, halcones, entre otras ventajas, para desestabilizar a cualquier gobierno.
Con los atentados a las tiendas Oxxo en Hidalgo y el Estado de México, demostraron que están dispuestos a sembrar el terror en varios puntos del país que gobierna Enrique Peña Nieto, para demostrar también su poder de fuego.
Recuerde amigo lector, que cuando entraron las fuerzas federales a Michoacán empezaron a quemar negocios en municipios de tierra caliente; sin embargo, como los militares y federales ya tienen el control en 27 municipios michoacanos, pues, simplemente, el terror también lo pueden sembrar en cualquier otro punto de la República.
Y para que el mensaje sea claro y preciso, se hicieron ataques en Hidalgo para decirle a Osorio Chong “aquí también estamos”.
El mismo jefe de la Policía de Hidalgo, Alfredo Ahedo Mayorga, es el único que supo interpretar los atentados en su entidad y reconoce que atrás de esto está el crimen organizado, sin mencionar nombres, pero sí, estableciendo que es “efecto cucaracha” por lo que está pasando en Michoacán.
Al menos en Hidalgo, se empezaron a custodiar sitios estratégicos de la CFE y Pemex, porque el terror se siembra con sabotajes, no sólo con quemar tiendas.
Mientras que en Hidalgo se reconoce el “efecto cucaracha” por la situación de Michoacán, en el Estado de México la tibia postura que dio el recién estrenado vocero de seguridad, Indalecio Ríos, deja mucho que desear y demuestra que no sabe a lo que se van a enfrentar en los próximos días.
Aunque sólo una tienda Oxxo fue incendiada en Tecámac, no deja de ser una señal para que el gobierno de Eruviel “se ponga las pilas” y efectúe vigilancias en las carreteras, así como en municipios, para evitar que hombres armados se desplacen con gran facilidad para causar pánico.
Pero Indalecio Ríos dice que no son necesarios operativos especiales y sólo estableció que hay una denuncia de hechos en la PGJEM, de Miguel Ángel Contreras Nieto.
Sólo hay que decirle a Indalecio -que habla a nombre del gobernador Eruviel Ávila Villegas- que el crimen organizado michoacano no se van a quedar quieto, que mientras tengan a la Policía Federal en la zona de Tierra Caliente y sobre las cabezas de sus líderes, van a hacer todo con tal de frenarlos.
Por ello, le insistimos al vocero de seguridad mexiquense que mejor hable con su jefe porque realmente ignora cómo se mueve el crimen organizado en nuestro país.
El gobernador de Hidalgo, Francisco Olvera, aseguró en el programa radiofónico de Joaquín López Dóriga, que la delincuencia michoacana no se ha trasladado a esa entidad, pero sí reconoció que se puede tratar de que el objetivo de los atentados sea la extorsión.
Pero la empresa Femsa -administradora de las tiendas Oxxo- no menciona los motivos de los atentados y sólo reconoce que fueron cinco los ataques a sus tiendas en Tolcayuca, Tula y Tecámac, dos de ellas incendiadas, así como a tres se les atacó con armas largas.