
A la carga
TOLUCA, Edomex., 6 de diciembre de 2017.- Con la convicción de cumplir las acciones apostólicas católicas y trabajar a lado del obispo de Toluca, Francisco Javier Chavolla Ramos, Monseñor Maximino Martínez Miranda, tomó posesión como obispo auxiliar de la Diócesis de Toluca.
«Seré siempre fiel a la iglesia católica… cumpliré las tareas apostólicas encomendadas a los obispos, es decir, enseñar al pueblo de dios, santificarlos por la comunión, velar por la unión de la iglesia universal…tendré gran cuidado de las promociones religiosas para atender las necesidades de toda la iglesia, cuidaré las obras misionales para la evangelización de los pueblos», fueron algunas de las palabras de Martínez Miranda en su profesión de fe y juramento de fidelidad.
Monseñor Chavolla Ramos solicitó al Papa Francisco, un obispo auxiliar, como apoyo para el gobierno y conducción pastoral de la Iglesia en Toluca, por lo que nombró a Maximino Martínez el pasado 28 de octubre para acompañar en las labores de la diócesis, asimismo será el representante del obispo cuando este se encuentre ausente o impedido para realizar actividades.
A la celebración eucarística de bienvenida asistió el cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo primado de México, quien expresó al obispo auxiliar que con su experiencia como obispo en Ciudad Altamirano, enriquecerá la iglesia de Toluca.
«Se que has vivido en carne propia dos accidentes para entender el dolor de los enfermos, has vivido la pobreza de tu amada diócesis de Ciudad Altamirano junto con el temor, la angustia y desolación en tierra caliente por los secuestros, los muertos y tanta violencia que ha orillado a muchos a migrar…todo eso te ha forjado como obispo en el dolor y silencio y comprender al pueblo sin voz y sin recursos», expresó el cardenal.
Por su parte, el obispo Chavolla Ramos, emitió mensaje de bienvenida al obispo Maximino, «Recorreremos con esperanza cristiana este momento histórico para nuestra iglesia particular de Toluca como un llamado a la conversión y renovación pastorales ante los grandes desafíos que la realidad nos representan… te recibimos con gratitud y alegría como un don que el Señor nos da a través del Papa Francisco y nos comprometemos acompañarte como nuestro hermano y sostener mutuamente en la oración».