Fomenta Codhem que niñas y niños participen en solución de conflictos

TOLUCA, Edomex., 4 de marzo de 2014.- El diálogo y el uso del lenguaje no violento, son fundamentales para tener una relación de respeto y ayudar a encontrar una alternativa a los conflictos en las escuelas a través de la mediación, por eso se debe enseñar a los niños a hablar y participar para encontrar una solución adecuada, indicó Mireya Miranda Carrillo.
La jefa de la Unidad de Mediación de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), señaló la importancia que tiene esta herramienta para resolver los conflictos, en cuya solución participan de forma directa los menores de edad, con propuestas creativas.
Explicó que cuando la sanción o solución es impuesta a los niños por los adultos, estos no siempre la cumplen, a diferencia de cuando ellos aportan una propuesta que se ajusta a su forma de pensar y hacer las cosas.
Miranda Carrillo, subrayó que el diálogo es fundamental en todo proceso de mediación, y éste no sólo se puede aplicar en conflictos escolares, sino también en el hogar, en el trabajo y en el lugar donde se desenvuelvan las personas.
Al referirse a la mejor forma de abordarlos y solucionarlos, destacó las reglas del llamado “Círculo Mágico”, en donde siempre se debe asumir la responsabilidad, respetar al otro, aplicar el derecho a creer lo que piensa, y ser concreto y preguntar los motivos para encontrar una solución.
El adulto debe evitar juzgar, criticar y aconsejar, recomendó, pues si no es parte del problema, no tendrá la respuesta; al contrario, debe hacer partícipe al menor de edad y aprovechar las propuestas creativas que ellos dan, porque al final de cuentas, tienen el derecho de hacerlo.
En ese sentido, se refirió a los niños que en un futuro estarán certificados en los centros educativos para desarrollar la mediación escolar, a fin de servir de mediadores imparciales, aunque advirtió que el hecho de que sea un asunto sencillo, no siempre tendrá una salida fácil, porque las partes involucradas deberán asumir su responsabilidad.
Asimismo, recalcó que el lenguaje no violento da pauta para resolver conflictos y en lugar de utilizar palabras con las que se afirma y acusa, se deben utilizar otras relacionadas con observar, sentir, pedir, agradecer y comprender necesidades, lo que al final de cuentas derivará en una solución con la que ambas partes ganen.