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COATZACOALCOS, Ver. y SALAMANCA, Gto., 14 de enero de 2014.- Con la Reforma Energética, se estima que se eliminen 20 mil plazas a nivel nacional entre los diferentes organismos de la paraestatal: Pemex-Exploración y Producción, Pemex-Refinación, Pemex-Gas y Petroquímica Básica y Pemex-Petroquímica. En la refinería Antonio M. Amor de Salamanca se espera que salgan alrededor de 120 trabajadores informó el presidente de la Alianza Nacional Democrática de Trabajadores Petroleros Juan Carlos Chávez González.
Se contempla que quienes salgan sea por jubilación anticipada. Se trata de trabajadores de un nivel medio con más de cinco años de antigüedad a quienes se les tendría que pagar al 100% “se habla de una jubilación de entre 500 mil pesos que se pagan al trabajador, por antigüedad y prestaciones, y catorcenalmente se tendría que pagar entre 12 y 13 mil pesos”.
Chávez González recordó que, en 1989, a la salida de Joaquín Hernández Galicia del sindicato, la plantilla laboral de Pemex era 250 mil trabajadores de base y eventuales. Actualmente se habla de 150 mil. Y ahora, los primeros en irse fueron los del centro petroquímico “Pajaritos”.
En Veracruz, luego de la compra de parte del complejo Pajaritos ubicado en Coatzacoalcos por la empresa Mexichen, lo que antes era Clorado Tres, muchos trabajadores ya se han quedado sin trabajo, debido a que la empresa trae a su propio personal. Con esta situación, no hay oportunidad para que los locales puedan firmar algún contrato, entre ellos, los que se dedicaban al mantenimiento, electricidad, mecánicos, de planta, mantenimiento civil, contra incendios y demás denunciaron los empleados quienes pidieron el anonimato.
Los trabajadores aseguran que para poder salir con un poco más de recursos en su catorcena, ellos buscaban por doquier las horas extras, situación que ya desapareció.
La situación de Pajaritos es muy crítica, explicaron, ya que siguen esperando una respuesta de su líder sindical, Ramón Hernández Toledo, quien desde que inicio todo el proceso de la Reforma Energética no les ha dado la cara. Aunque algunos hasta el momento se sienten tranquilos porque por el sistema contractual no les pueden hacer algo hasta el 2015.
Sin embargo, el Contrato Colectivo de Trabajo permite el patrón haga las adecuaciones necesarias a fin de mejorar su productividad. También establece que, para jubilarse, un trabajador debe tener 35 años de antigüedad en la empresa o 55 años de edad. Sin embargo, a partir de los 35 años de edad ofrecen la jubilación anticipada y que la última plaza no se cubra.
«Yo no soy partidario de algún partido, pero algo si, cuando andábamos en elecciones nos pedían y decían que la mejor opción era Peña Nieto y ahora ya no sabemos si nos afectarán en el próximo contrato y no nos imaginábamos que iba a pasar todo eso» explicaba un trabajador petrolero a la Agencia Quadratín.
Otra situación que les preocupa, es que los quieren pasar al Sistema de Seguridad Social del IMSS y ya no les darían el servicio médico a través del hospital de Pemex como lo venían haciendo.
Chávez González, que es trabajador jubilado de Pemex y también dirigente del PRD en Salamanca, explicó que esta situación con los trabajadores es a consecuencia de la firma del convenio administrativo-sindical 10717/2013entre Pemex y el Sindicato de Trabajadores Petroleros.
Por esta situación, se contempla que se presenten jubilaciones anticipadas en todo el país, las cuales costarían a la empresa hasta 500 mil pesos por cada una.
“En los últimos dos sexenios se acusó al pasivo laboral de la empresa como insostenible, principalmente por el esquema de pensiones, cuando en realidad el gobierno federal ha dejado de invertir en tecnología y ya van 30 años sin construir ninguna refinería”.
De acuerdo con datos proporcionados por trabajadores al interior de los complejos, aún hay mafias entre los líderes de departamentos, que les piden de 500 a mil pesos o más dependiendo el trabajo para darles contrato y que además hay una gran fuga de recursos puesto que cada quincena les descuentan al menos cuarenta pesos a más de 20 mil trabajadores.
«Claro que el círculo está cerrándose, ya hay menos trabajo y más personas que están solicitándolo».
Algunos empleados reconocen que están tranquilos ahora, porque su contrato vence en agosto del 2015, no saben que pasará pasando esa fecha, ya que la situación podría cambiar y muchas de las prestaciones que por años han tenido podrían terminarse. O podrían quedarse sin trabajo.
Existe la zozobra, porque les han informado que los requieren para las firmas de documentos con respecto a sus plazas, temen que con mentiras los obliguen a firmar su renuncia. De ocurrir esta situación tomarían las carreteras y se manifestarían en contra de sus líderes.