Muere niña tras ser arrollada por camión público en Toluca; su madre lesionada
SAN SALVADOR ATENCO, Edomex. 13 de agosto de 2014.-La madre de Eduardo Méndez Rizo, salió la mañana del 22 de diciembre de 2012 de su casa en el pueblo de Santa Isabel Chalma, para trabajar, pero ya no regreso. Ella tienes ocho meses reportada como desaparecidas ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), pero aún no hay algún resultado de las investigaciones.
Ella se llama María Dolores Rizo Juárez, tiene 48 años de edad y salió de su hogar el 22 de diciembre del 2013 a las 6:15 de la mañana, ya que tenía que entrar a las 7: 00 am.
De acuerdo a los datos que proporcionó su hijo, tenía que caminar hasta la carretera Texcoco-Lechería y de ahí, cruzaba a pie a la entrada de Tequistitlán, para la comunidad de Texpepan, del municipio de Acolman.
“Ella trabajaba en el comedor de la Comex y nos dijo que ese día iba a doblar turno, por lo que saldría a las 21:00 horas. Acostumbraba a travesar la carretera a pie y seguir por un tramo de terracería que se conoce como camino viejo a Tepexpan por el Cecytem”, recordó el hijo de María Dolores Rizo Juárez.
Su madre desapareció en el trayecto de su casa a su trabajo, ya que al día siguiente le informaron que ella no se había presentado a trabajar.
Aseguró que se reportó de inmediato a Locatel, a las autoridades de seguridad pública municipal, “pero tuvimos que esperar las 72 horas que marca el ministerio público, para reportarla como desaparecida”.
Junto con su padre, José Ascención Méndez Álvarez, fueron a recorrer el camino que era el de su mamá, y ahí encontraron tiradas, al lado de las vías, que dividen las comunidades mencionadas, su crema para las manos, dos toallas sanitarias envueltas y su cepillo de dientes.
Esto fue, como a 25 metros de las vías, en una zona de sembradíos, que está muy sola, y corre un canal de aguas negras. “Los peritos que envió la PGJEM fueron a inspeccionar la zona un mes y medio después de la desaparición de mi madre”.
Eduardo Méndez puntualizó que al principio los agentes ministeriales que tomaron el caso realizaron muy bien su trabajo, “nunca nos pidieron dinero”, pero empezamos a toparnos con muchos inconvenientes, como que en las cámaras de video, que son propiedad de un negocio de carrocerías, nunca vieron el momento en que María Dolores atravesó la carretera.
“En tanto que en las cámaras de seguridad pública de Tezoyuca, no se captó nada, porque el día de los hechos, por razones desconocidas, estuvieron apagadas de las 1:00 de la madrugada a las 7:05 de la mañana”, destacó Méndez Rizo.
Dijo también que hasta la fecha el número celular de su progenitora que el 0445515214055 continúa enviando a buzón, por lo que él y su familia confían en que ella continúe viva, pues hasta la fecha nadie se ha comunicado con ellos para pedirles dinero, u otra situación.
Subrayó que una situación importante, es que cuando días después de la desaparición, ellos se dieron a la tarea de recorrer los alrededores, por donde caminaba su madre hacia el trabajo, fue que unos hombres fuertemente armados amenazaron a sus familiares, cuando incursionaron por el camino de terracería a Tepexpan, en un lugar donde hay una fábrica de vidrio molido y que no hay alumbrado público.
Este caso fue tomado por la fundación “Siguiendo tus Huellas” y la carpeta de investigación que se inició fue la 322180360191312, por denuncia de hechos. Méndez Rizo reiteró su llamado a las autoridades para que se de celeridad a la investigación y se encuentre a los responsables del extravío de su progenitora.