Exfuncionario federal de Chihuahua vinculado por feminicidio de su esposa
MÉXICO, DF., 23 de febrero de 2014.- Alrededor de 500 periodistas de diferentes lugares de la República bajo el lema de ‘Prensa, no disparen’, se congregaron este domingo en el Ángel de la Independencia para protestar en contra de la violencia hacia el gremio, además de exigir se investigue el asesinato del periodista veracruzano, Gregorio ‘Goyo’ Jiménez.
La concentración se desarrolló con una serie de presentaciones de comunicadores que fueron secuestrados o amenazados, ahí se escucharon las historias, que empezaban con la voz “¡Extra, extra, 18 periodistas han desaparecido, extra, extra!”.
“Nos secuestró la delincuencia organizada para hacernos voceros de ella”, decía un reportero que junto con Alejandro Hernández fueron privados de la libertad, “La vida ha cambiado para todo el periodismo en nuestro país a río revuelto ganancia de pescadores, es muy fácil eliminar a cualquier periodista y echarle la culpa a la delincuencia organizada cuando también los periodistas exhiben y exponen ante la sociedad el mal trabajo de los gobernadores, sobre todo ante su incompetencia para dar seguridad y paz, hoy nos reunimos aquí no sólo para rendir homenaje a quienes con su deber han caído y perdido la vida, si no también que se garantice el derecho que tiene la ciudadanía de conocer la realidad y q muchas veces el propio gobierno o los delincuentes intentan callar”.
Entonces alguien, leía su historia, “claro que tengo mucho miedo, aunque tengo más miedo como periodista de quedarme callado y con los brazos cruzados para tratar de recuperar la paz social y que nos impulsa como voceros del pueblo para hablar con la verdad e informar para que la sociedad esté bien informada y en la medida para que puedan tomar decisiones para el mejor rumbo para todos, soy un periodista tamaulipeco que lucha para que las cosas no se callen, porque represento a todos los que en mi estado viven atemorizados. Yo fui víctima de la delincuencia, sufrí un secuestro de ocho días pero estoy aquí con la imperiosa necesidad de ser solidario para que se unan a esta lucha”.
Luego en ausencia de Luis Cardona, comunicador de Chihuahua, otro periodista, contaba sobre su plagio: “No esperen ser víctimas, cuando está uno sólo con sus captores que te interrogan, te golpean, te dicen que te van a cortar las manos, te amenazan con que van a matar a tu familia, te golpean en la cabeza, te quitan los zapatos y te golpean con una tabla, te encadenan, te ponen un torniquete en el cuello ´para que veas que se siente morir asfixiado, te queman los testículos te ponen una arma en la cabeza y te dicen que te volarán los sesos, estas sólo con tus captores y no piensas en nada, sólo en tu familia”.
Para finalizar, una amiga de Gregorio Jiménez, luego de recordarlo, leyó un comunicado de cinco puntos, en el primero exige que el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, garantice las condiciones para el ejercicio de la libre expresión en México, y que instrumente una estrategia especial para proteger la integridad física de los trabajadores de los medios de comunicación en todo el país, empezando por Veracruz.
Segundo, que la Procuraduría General de la República, a través de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos en contra de la Libertad de Expresión (FEADLE), amplíe y profundice las investigaciones relacionadas con el asesinato de Gregorio Jiménez de la Cruz, y que solicite la incompetencia del juez para que el caso sea asumido por un juez federal.
Tercero, que los órganos de Estado como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, rindan cuentas de su desempeño. Han dispuesto de recursos millonarios pero la vida de cientos de periodistas sigue amenazada.
Cuarto, que la Comisión Especial para Atender Agresiones contra Periodistas del Senado de la República le exigimos que cumpla con su responsabilidad y cite a comparecer al procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, y al encargado de despacho de la Procuraduría General de Justicia de Veracruz, Luis Ángel Bravo, para que expliquen los avances en las investigaciones respecto a los asesinatos de periodistas en Veracruz.
Y al gobierno de Veracruz, lo siguiente: garantice la seguridad de los periodistas que se han manifestado en solidaridad con Gregorio Jiménez. Cesen las presiones a los medios de comunicación, y no se utilicen los convenios publicitarios como elemento de censura ni para premiar coberturas favorables en la prensa estatal. Se establezca un fondo que garantice pensiones para los dependientes económicos de los periodistas asesinados y se pague la educación de los menores de edad hasta el nivel superior, ya que el asesinato de periodistas se debe a la impunidad y a la falta de garantías para ejercer el periodismo.
Al finalizar se congregaron todos al centro para gritar consignas como: ‘Goyo no te hemos olvidado’.