
Make Iran Great Again (1ª parte)
¡Citoyens!
La Guillotina Política no tolera a los cobardes ni a los parásitos que se arrastran de un municipio a otro, buscando un nuevo botín donde sembrar su peste. Hoy, nuestro filo se abate sobre Anuar Azar Figueroa, ese diputado panista que, tras ser aplastado por Morena en las elecciones de 2024 en Izcalli, ahora, cual alimaña, ha migrado cobardemente a Atizapán de Zaragoza para intentar saquearlo.
Este «pseudo candidato golondrino» no solo cambió su domicilio con la misma facilidad con la que cambia de principios, sino que ahora, con la desfachatez que caracteriza a los corruptos, se lanza en actos anticipados de campaña. ¿Con qué dinero? ¡Con los recursos económicos y políticos del Comité Directivo Estatal del PAN! Mientras el partido clama por «transparencia» y «democracia», sus dirigentes como Jorge Romero miran hacia otro lado, cómplices de este saqueo a la militancia y a la ciudadanía. Anuar Azar es la viva imagen del político que solo piensa en su beneficio personal, un cáncer que carcome las entrañas de lo que queda de su partido.
Pero la infamia no termina ahí, Citoyens. Es de conocimiento público, y las pruebas adjuntas lo gritan, que este parásito está recibiendo apoyo político y financiero directamente del actual presidente municipal de Atizapán, Pedro Rodríguez. ¡El mismo Pedro Rodríguez cuya administración apesta a extorsión, a síndicos detenidos por placas sobrepuestas y a policías corruptos! No contentos con desangrar Atizapán desde dentro, ahora abren las puertas del palacio municipal para que Anuar Azar use sus oficinas como centro de operaciones para su imposición. La complicidad es tan descarada que ya ni se molestan en ocultarla.
Esto no es política; es una mafia. Una lucha interna donde los caciques se reparten los feudos, ignorando la voz y la voluntad de los ciudadanos. Se pretende una imposición en Atizapán de Zaragoza, y quienes alzan la voz contra ella, tienen todo el apoyo de esta columna. Es hora de que los medios independientes griten a los cuatro vientos esta desvergüenza, para que ningún ciudadano sea engañado por este «golondrino» con fuero.
La Guillotina Política lo sentencia: Anuar Azar Figueroa no es un candidato; es un depredador. Su arribo a Atizapán, apadrinado por Pedro Rodríguez y solapado por Jorge Romero, es una declaración de guerra contra la dignidad de los atizapenses. Es hora de que la ciudadanía desenmascare a estos impostores y corte de tajo la cadena de complicidades que los protege.
Con el acero de la razón y la furia de la verdad,
Robespierre.