Libros de ayer y hoy
TOLUCA, Edoméx., 21 de noviembre del 2016.- Desde el punto de vista de protección de su economía, recalcare que la venta de armas de fuego en México, corresponde exclusivamente y por ley a la Secretaria de la Defensa Nacional y para eso existe toda una reglamentación que cita los requisitos para que ciudadanos mexicanos en uso de sus derechos puedan comprar un arma.
Comprar un arma en mercado negro cualquier tipo de pistola o rifle que le ofrezcan ya sea nueva o usada, desde el punto de vista estrictamente económico es un riesgo ya que para empezar el cálculo de su precio se basa en que tanto la desee, porque recuerde que las armas igual que las joyas son objetos de deseo no necesariamente de necesidad, en el caso de que no sean parte de sus utensilios de trabajo diario como los policías o los militares me refiero.
Luego entonces ¿cuánto valdrá?
Mucho, mucho más que el costo comercial, sin garantía y sin la posibilidad de adquirir legalmente lo que toda arma de fuego requiere para funcionar, municiones, si las balas o cartuchos también entran en este ilegal paquete, sin mencionar además que como todo artefacto mecánico requieren de mantenimiento y que cada una de ellas podría tener antecedentes que lo involucre en algún delito, su posesión ilegal lo expone a multas severas y que decir del financiamiento al crimen organizado que por medio de usted lograría obtener.
El 24 de abril del 2013, el senado de la república reformo la ley federal de armas de fuego y explosivos en el sentido de fortalecer el combate al mercado negro de armas, imponiéndose de 50 hasta 720 días de multa a quienes sin el permiso correspondiente porten un arma de uso exclusivo de las fuerzas armadas.
¿Sabe usarla?
Este factor que de entrada parecería de poco peso, en realidad no, no lo es, estamos tan habituados a ver en…programas de televisión, cine, videos etc. Como sus atrevidos personajes usan pistolas y rifles con mucha naturalidad, la que nos parece tan familiar y nos hace pensar que usar un arma es…Facilísimo. Y no esto es un error.
Si usted es dueño de un arma de fuego y no sabe usarla y la compro para su “seguridad”, estará encontrando el resultado contrario, ahora está en más riesgo y para empeorar esto, también pone en riesgo a las personas que están cerca de usted al tener en sus manos esa arma, su familia, sus compañeros de trabajo etc.
Iniciativa de ley.
El 6 de octubre de este año el senador del PAN, Jorge Luis Preciado, presento una iniciativa para modificar el art. 10º de la constitución y los reglamentos que de ella se desprenden partiendo del razonamiento que aquella persona que considere que puede mejorar su seguridad teniendo un arma en su auto o en su negocio lo pueda hacer, porque en este momento eso es delito.
El senador señalo, además, que si bien hay quienes se han pronunciado en contra de esta propuesta, también existen muchas personas que están a favor, particularmente aquellas que han sido víctimas de algún delito.
Mitos y realidades
Actualmente entre la población existen mucha información equivocada, tergiversada o desinformación alrededor de lo que significa tener un arma de fuego.
La ley y su reglamento son públicos y de suficiente claridad al respecto, si usted quiere consultarlos los encuentra en estas direcciones:
Ley federal de armas de fuego y explosivos http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/102_12nov15.pdf
Reglamento de la Ley federal de armas de fuego y explosivos http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/regley/Reg_LFAFE.pdf
Las partes que a usted le podrían interesar más, son los apartados dedicados a la Posesión y a la portación.
Tener un arma de fuego real no es un juguete, es un instrumento con el que usted puede quitar o quitarse la vida.
Para un país como México es sano y muy deseable que cualquier tema que beneficie o amenace a la sociedad sea discutido a todos los niveles para darle el cauce que la gente quiera, finalmente eso significa democracia, el tema de las armas de fuego tendrá aún más capítulos por recorrer antes de llegar a una conclusión, sin embargo, con o sin cambios en esa ley el que decide, es usted.