Ciencia y tecnología, promotores de bienestar y prosperidad: SEP
TOLUCA, Edomex., 18 de abril de 2018.- A pesar de la información abundante sobre sexualidad y reproducción en la población juvenil, falta acompañamiento institucional, ya que sigue habiendo embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual debido a que los jóvenes no saben qué hacer en dichos casos.
«No hay claridad entre los jóvenes, tenemos la premisa de que el acceso a la tecnología nos cubre, todo lo podemos consultar en internet, pero evidentemente no porque hay vacíos, hay desconocimiento de los caminos institucionales a seguir cuando pasa en la universidad», explicó Patricia Román Reyes, profesora e investigadora del Centro de Investigación de Estudios en Movilidad y Migraciones.
En el marco del Semanario Juventudes Relaciones de Género, Salud Sexual y Reproductiva, organizado por la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), un grupo de académicas presentó los resultados de la encuesta realizada a la comunidad auriverde.
La investigadora detalló que dicho estudio fue realizado a orden de rectoría, para posteriormente establecer acciones para fortalecer a los estudiantes y cambiar las estadísticas, en la que una de las principales preocupaciones son los embarazos, pues en el 75.8 por ciento de los casos son no deseados.
Asimismo, precisó que las estudiantes que se embarazan de forma general se rezagan y en algunos casos ya no retornan, «son las mujeres universitarias quienes tienen que abandonar sus estudios para parir, a diferencia de los hombres quienes si continúan con su carrera», explicó.
La encuesta además arrojó que el 60 por ciento de los estudiantes de la UAEM son sexualmente activos y el 64 por ciento usan condón, lo cual evidencia que aún persisten significativos vacíos de información sobre métodos, utilización y realización de prácticas sexuales y salud sexual.
Román Reyes, resaltó que la desinformación podría deberse también a elementos culturales, ya que el tema de la sexualidad y la reproductividad sigue siendo tabú, miedos y perjuicios de género, «por eso se debe ver desde distintos niveles, no podemos echarle la culpa a la UAEM de todo porque hay conductas individuales que se construyen desde los aspectos culturales», dijo.
Sin embargo, la académica resaltó que lo que se debe hacer es abrir espacios de salud en la universidad, que tengan vinculación con la salud sexual para que haya una información clara que acerque a los estudiantes para que conozcan sus derechos, identifiquen situaciones de riesgo o las vinculadas a la violencia y así poder acompañarlos.